El fotógrafo neoyorkino James Bidgood (1933) inició en 1971 el proyecto de rodar "Pink Narcissus", en el que se representaban las fantasías eróticas de un joven homosexual. El personaje central es un joven chico que se dedica a la prostitución, Bobby Kendall, a través de sus ensoñaciones eróticas, en las que aparece como torero, esclavo o el mismo personage mitológico de Narciso.
El film fue rodado en 8 mm durante ocho años en su minúsculo apartamento de Nueva York, su perfeccionismo le hacía rodar con enorme parsimonia. Kendall era su pareja y con él logra escenas de un enorme erotismo, en medio de unos decorados rococó en los que impera el color rosa.
Bidgood queria reivindicar la homosexualidad en medio de una sociedad poco tolerante con ella, pero quienes financiaban la obra al final se cansaron y montaron el film, que se estrenó como obra anónima. En 1999 pudo conocerse su autoría y en el 2003 fue reestrenada.
El peculiar estilo de Bidgood ha influido en otros fotógrafos gays como Pierre et Gilles.
El peculiar estilo de Bidgood ha influido en otros fotógrafos gays como Pierre et Gilles.
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Esto trata de cuando la homosexualidad roza lo hortera y lo cutre y pasa a denominarse llanamente "mariconadas"; eso sí, el chaval está imponente, me ha recordado a ciertos personajes de las películas de Pasolini. Lo mejor de todo sin lugar a dudas es la banda sonora, lo dice todo...
ResponEliminaSaLu2
A mi me parece maravilloso el estilo kitsch de la película (el teléfono dorado es "lo más"). Es el punto donde el mal gusto se vuelve estética de buen gusto. Efectivamente Pierre et Gilles bebieron en estas fuentes y sus obras son maravillosas.
ResponEliminaLo sorprendente es que en el 79, tal vez, la vimos en la Filmoteca de BCN, en la calle Mercaders y nos parecía normal. La sociedad se volvió tan moralista que hoy parece un film descaradísimo.