dijous, 4 d’agost del 2011

RUDOLF BRAZDA, ULTIMO TESTIMONIO HOMOSEXUAL DE LA BARBARIE NAZI.

La historia de Rudolf Brazda no difiere mucho de la de Pierre Seel, dos jóvenes que vieron truncadas sus vidas por la barbarie de la intolerancia nazi. Ambos conocieron el odio del horrible régimen de Hitler. ambos tuvieron que ocultar su condición una vez acabada la Segunda Guerra Mundial, pues la homosexualidad estaba prohibida.

Portada del libro 'Rudolf Brazda. Itinerario de un triángulo rosa'

Con solo 20 años vivía abiertamente su homosexualidad en Sajonia cuando fue detenido por primera vez, mas tarde vino el Campo de Concentración de Buchenwald. Allí los homosexuales eran el escalón mas débil, el que mas humillaciones recibía, eran utilizados como cobayas. El colectivo homosexual es el que tenía la mayor tasa de mortalidad en los campos de concentración. Un estudio afirma que el 60% de los homosexuales en campos de concentración murió, comparado con el 41% de los prisioneros políticos y el 35% de los testigos de Jehová.
Rudolf a diferencia de Pierre pudo llevar una vida relativamente feliz, optó por vivir en el anonimato pero lo pudo hacer junto a su pareja  Edouard Mayer durante 50 años, también apátrida por su condición de suabo (alemán de Hungría). Ambos se instalaron en Alsacia donde la homosexualidad no estaba perseguida.

En el 2008  salió del anonimato con motivo de la inauguración del Monumento a los homosexuales perseguidos por el nazismo. Se creía que ya no quedaban supervivientes. Antes de morir en este mismo años ha recibido la "Legión de honor" y ha publicado su biografía Das Glück kam immer zu mir. Rudolf Brazda: Das Überleben eines Homosexuellen im Dritten Reich («La suerte siempre volvía a mí. Rudolf Brazda: la supervivencia de un homosexual en el Tercer Reich»).
El tres de agosto de 2011 fallecía en su hogar mientras dormía, tenía 98 años.Mas información sobre Pierre Seel y el holocausto nazi: http://leopoldest.blogspot.com/2011/01/pierre-seel-testimonio-del-estigma-y.html

6 comentaris:

  1. Excelente documento y realmente conmovedor.

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  2. A mi parecer aún a día de hoy no se ha hecho justicia, es un tema que está ahí, que les dan una palmadita y que parece que estuvieran esperando la total desaparición.

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  3. Buen artículo, excelente como siempre.

    Sólo me gustaría que quedara más clara la estadística de % muertos en el campo de concentración que se nombra. Faltaría saber si en ese campo no había otros colectivos: judíos, gitanos, etc, o bien se da por supuesto que realmente era el colectivo homosexual incluyendo aquellos.

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  4. Es muy dificil realizar estadísticas, pues los homosexuales eranmezclados muchas veces con enfermos mentales o vagabundos.

    Entre 250.000 y 600.000 personas por ser homosexuales o tener relaciones sexuales con otros hombres fueron deportados a campos de concentración, allí eran considerados la escoria de la escoria.
    Palizas, castraciones, trabajos forzados, inyecciones mortales con morfina, lobotomías eran la práctica común. Los mas jóvenes se les hacia servir como cobayas. Los suicidios eran numerosos, el porcentaje fue el mas alto después de la comunidad judía, se cifra por encima del 60%.

    Pocos regresaron a casa, cuando lo hicieron la homosexualidad seguía siendo considerada un deleito. Por ello y por miedo al estigma los familiares, amigos y afectados optaron por el silencio, por ello las cifras reales aun hoy se desconocen.
    En el año 2000 se conocían menos de diez prisioneros vivos que llevaron un triángulo rosa. Solo recientemente se ha comenzado a fijar las historias de estos prisioneros. El gobierno alemán empezó a reconocerlos en el 2.002, la mayoría ya habían muerto

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  5. Xabier Lizarraga Cruchaga11 de novembre del 2011, a les 17:14

    Leopold, sobre este caso en particular no sabía nada, gracias por la información. Me gustaría que pronto se tradujera el libro al español (me imagino que aún no lo está). Sin duda, de todos los presos en campos de concentración el colectivo homosexual fue, después del fin de la guerra, igualmente perseguido.
    El porcentaje evidentemente es imposible de establecerlo, porque además hay que pensar que entre judíos, gitanos, comunistas y demás TAMBIÉN HABÍA HOMOSEXUALES, así que sin duda vivían dobles presiones, rechazados por sus propios grupos, aunque en principio no hayan sido conducidos a los campos por su preferencia sexo-erótica.
    El cálculo de 250,000 me parece muy bajo, y quizás desborda con creces la cantidad de 600,000. Aunque lo importante es que fue el único grupo que no consiguió apoyo alguno por parte de los "liberadores".

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