divendres, 10 de desembre del 2010

LA HOMOFOBIA QUE NO CESA (IV)

Alaska ha hecho méritos extraordinarios para ser declarada la homofoba del mes empatada con Benedicto XVI que ha hecho un esfuerzo importante para serlo. A última hora la Fundación Caja Murcia se ha llevado la palma. En la Exposición "De cuerpos y almas" 5 obras han sido censuradas "para no herir la sensibilidad", en ellas se muestran escenas de parejas del mismo sexo.
Mientras Alaska salia en defensa de Intereconomía, a la que no considera homofoba, Benedicto XVI declaraba:

Europa no sería más Europa si el matrimonio entre un hombre y mujer desapareciera o dejara paso a otras formas de uniones que no tienen base en la historia, la cultura y el derecho europeo”.

Pocos días antes:

“la homosexualidad (no) pasa a ser moralmente justa, sino que queda como algo que está contra la naturaleza de aquello que Dios ha querido originariamente” 
 En África hemos visto al Primer Ministro de Kenia repudiando las relaciones homosexuales y pidiendo prisión para quienes las practiquen. La palma se la ha llevado el periódico Rolling Stone, en periódico publicó un artículo de portada que incluía imágenes de los que llamó los 100 "principales" homosexuales de Uganda, con una banda amarilla en la que se leía "Ahórquenlos", sus números de teléfono y direcciones.
 No han faltado los falsos profesionales que pretenden curar la homosexualidad. En Ecuador se cree popularmente que la homosexualidad es una “enfermedad curable”, por lo que clínicas ilegales internan a jóvenes, por lo general obligados por sus padres, con la esperanza de que los “expertos” cambien su orientación sexual, según reseñan autoridades y activistas de la comunidad LGTB.

En Sevilla hemos conocido al decano de la facultad de psicología, Antonio Aguilera Jiménez ,  quien considera a la homosexualidad una enfermedad sanable. Su asociación, Movimiento Social Cristiano, ha editado un libro titulado: "Comprender y sanar la homosexualidad".
Pero como siempre los máximos representantes de la Iglesia Católica se destacan por sus comentarios homofobos. El cardenal-arzobispo de Bolonia, Giacomo Biffi, ha sido uno de ellos:

“La ideología de la homosexualidad se ha convertido en una amenaza a nuestra legítima autonomía de pensamiento”. “Los ataques a la libertad de pensamiento empiezan por el lenguaje. Aquellos que no se resignan a aceptar la ‘homofilia’ son acusados de “homofobia’

Y mientras tanto facebook como la propia policía barcelonesa hicieron esfuerzos denodados para impedir una besada colectiva al paso de Benedicto XVI por las calles de Barcelona, infuctuosamente.

6 comentaris:

  1. Releía una obrita( el nombre no viene al caso) en donde se criticaba el concepto reichiniano de la sexualidad, basado en el binomio hombre mujer, en la cópula, y en los instrumentos pene envoltorio vagina.Y viendo los tiempos que me han tocado vivir, la eclosión de miles de usos en libertad ( que no denigran al ser humano) que permiten un riquísimo y innovador uso del cuerpo o de los cuerpos. Modelos que subyacen en los extremos, por ejemplo los marxistas, o en ciertos elementos tachados de religiosidad institucionalizada, versus Ratzinger y otras lindezas del país tenebroso del miedo y de los prejuicios.Existe homofobia, y otras muchas fobias dirigidas contra personas, grupos o simplemente contra aquellos que han hecho de su libertad un condicionante de su existir.
    Pero lamentablemente ese es un ingrediente de la libertad,su esfuerzo por superar todo aquello que por la fuerza de la sinrazón quiere limitarla.No es una fobia contra los homosexuales siendo como es un rechazo a la homosexualidad, es una fobia manifiesta contra el ser humano( cualquier ser humano) y la libertad.

    ResponElimina
  2. Tambien podriamos hablar de otro tipo de fobia, aquella que oculta y niega su propia sexualidad. El miedo a asumir su propia homosexualidad lleva a desarrollar en muchas ocasiones una actitud de odio y persecución contra quienes la viven libremente. La homofobia interiorizada es una característica que está detrás de muchos intolerantes.

    ResponElimina
  3. Hola Leopold,que variación más oportuna.Negar de forma inconsciente y compulsiva,los propios derroteros,inclinaciones y tendencias que bullen en nuestro interior.Que es muy distinto al hacerlo de forma decidida y con conciencia.Aquello de no darse gusto para también con ello tener un gusto mayor.
    Esa autofobia que se proyecta en los demás, odios, manías, obsesiones que incapacitan para una vida de relación plena, caen dentro de la patología( a mi modo de ver).Es uno de los núcleos de cristalización de las conductas paranoides y expresión también de un gran sufrimiento.
    ¿Cuantas de las fobias sociales o de grupo no tienen en el individuo esta génesis común?
    ¿ No se detesta aquello que nos domina?
    Y en eso apuntas como siempre en la dirección adecuada Leopold.

    ResponElimina
  4. Esto te va a interesar:
    http://leopoldest.blogspot.com/2010/09/la-rabia-de-terciopelo-las-raices-de-la.html
    Es un resumen del magnifico libro The velvet rage de Alan Downs, no sólo nos sirve para ayudar en los procesos de salida del armario, tambien en los procesos del duelo tras diagnósticos "positivos" del VIH o separaciones traumáticas.

    ResponElimina
  5. Puedes compartirlo, Gabriel lo tradujo para darlo a conocer.

    ResponElimina
  6. Muchas gracias Leopold.Lo leí rápido por la premura del horario que me acompaña.
    Antes de captar sus muchos ángulos,unas pequeñas observaciones.
    Desde bien pequeño que yo recuerde jamá hice acepción de personas, y no por ser más o mejor que nadie.Me salía así.Y con catorce años me dí de fostias con unos chavales que se metieron con un muchacho gay, del que no estaba entusiasmado, y del que sólo sospechaba que era diferente.
    En mi relación con los demás soy consciente de las sombras, ocultamientos y a veces profundos motivos de sus odios o simpatías.También gozo como un enano con los espíritus grandes, sean estos gays, del atletic o de acción católica.
    La identidad se respeta, aunque a veces esté en un proceso constante de concreción.
    He trabajado con pacientes con el HIV.
    He compartido horas con personas en busca de identidad.Nuestro mundo es muy complejo.
    Huyo de manuales y de tabloides anunciando la bondad de un método que nos explique el porque sufrimos y como Borges digo que el único pecado que he cometido ha sido el " no ser feliz".Aunque estoy en ello.
    Un abrazo.

    ResponElimina

PAJAMA, EL COLECTIVO MÁGICO.