dissabte, 22 de desembre del 2012

JAIME I ESTUARDO, LONG LIVE QUEEN JAMES


El futuro sucesor de la todopoderosa Isabel Tudor no vino al mundo en el mas feliz de los hogares. Al poco de nacer su padre aparecía muerto desnudo en la cama con uno de sus pajes, mientras su madre, la reina María Estuardo tenía su propio amante: David Rizzio, tal vez el verdadero padre del futuro rey. Las conspiraciones de la levantisca nobleza escocesa obligó a huir a la reina que buscó refugio en casa de su verdugo, la reina Tudor.

Jaime I (James I Stewart) 1566-1625, fue el sucesor al trono de Inglaterra tras la poderosa Isabel I  antes a los 13 meses fue coronado como rey de Escocia. Sus amantes masculinos eran tan evidentes para la población que pronto se le denominó como la Riena James, circulando pasquines con el siguiente lema: Rex fuit Elizabeth: nunc est regina Jacobus  (Antes Isabel fue rey, ahora la reina es Jaime)

Apasionado por la caza, gran comedor y desmedido bebedor, Jacobo era un erudito de primera categoría, capaz de rebatir los argumentos de los sabios, teólogos y juristas, de abrumarles con tercos discursos en latín y sumergirlos bajo una catarata de citas bíblicas. Pero, a la vez, era un hombre caprichoso, vanidoso y sumamente cobarde, del que se decía que no podía ver una espada sin echarse a temblar. Se hallaba desprovisto de toda gracia y se lavaba muy raramente, complaciéndose con cinismo en su desaseo. Tenía accesos de cólera durante los cuales no sabía bien lo que decía, llegando a los insultos, y sus súbditos creían que le faltaba dignidad.


Su aversión a las mujeres, se le unió los títulos, regalos  o tierras que regaló a sus jóvenes favoritos, hecho que lo hizo enormemente impopular pues arruinó el tesoro público. Su primer amante fue un noble francés mayor que él, llamado Esmé Stuart, tio suyo. Jaime tenía solo 13 años y se prendó de tal forma que no tubo ningún rubor en mostrar públicamente su amor, besando, abrazando o acariciando en público a su tio.


Esta relación pronto fue vista con desconfianza por parte de la nobleza escocesa y especialmente por la reina Isabel , viendo con preocupación que el futuro rey de Inglaterra optase por acercarse a Francia y el catolicismo. Una conspiración les separó y aunque se juraron amor eterno, un año después Esmé fallecía. Fue el último amante mayor que él que tuvo el joven Estuardo.

Tras este episodio hubo una temporada en la que no se le conocen amantes masculinos. Se casó con Ana de Dinamarca y cumplió con sus deberes con el estado dándole descendencia. En 1603 moría la reina Isabel y el asumía la corona inglesa. Los ingleses nunca soportaron a los Estuardo, a los que veían como vagos, viciosos, procatólicos y arbitrarios, es decir poco partidarios de consultar al parlamento. Ello sin duda ha permitido conocer las interioridades de este rey que no se preocupó jamás en ocultar su gusto hacía los hombres mas jóvenes que él.

El primer amante en Inglaterra fue Robert Carr, un atractivo paje escocés de 20 años, éste aprovechó el amor que el rey sentía por el para poder escalar en la corte. Y de paje, pasó a favorito, a miembro del Consejo Privado, otorgándole el título de conde de Somerset. Carr tenía además otro amante, Tomás Overbury, quien en un rapto de celos amenazó en hacer pública esta relación. Con la ayuda de su amado monarca de deshicieron de éste incomodo personaje, pero fue su propio fin al descubrirse la verdad.



El nuevo amante real fue el favorito George Villiers Duque de  Buckingham (conocido por su supuesto amorío con la reina de Francia Ana de Austria). A diferencia de los anteriores fue un hombre no solo atractivo, también inteligente y un buen gestor. Su gran capacidad hizo que tras la muerte de su amado y protector, siguiera en sus funciones con Carlos I.

 En cierta ocasión el propio rey interpelado por su propio consejo privado declaró: "Ustedes pueden estar seguros de que me gusta el conde de Buckingham más que nadie, y más que cualquiera de ustedes"

Villiers era de origen humilde. Comenzó como copero real y llegó a ser vizconde y finalmente duque. Entre ellos se llamaban "amo y esclavo" incluso "siervo y su perro". Las crónicas hablaban de un rey que cocoqueteaba como una reina a su favorito real. Por Francia, no muy amigos del Duque, corrió un poema muy popular que acababa así:

Un hombre folla Monsieur-le-Grand de Bellegarde
Otro folla el conde de Tonnerre.
Y es bien sabido que el Rey de Inglaterra
Folla el duque de Buckingham.


"Podéis estar seguros de que yo amo al conde de Buckingham mas que a nadie. Hablo en nombre propio, y no pensar en ello como un defecto, ya que Jesucristo hizo lo mismo, y por lo tanto no puedo ser culpado. Cristo tuvo a San Juan, yo tengo a  mi George" (cita de "Reyes Sodomitas" de Miguel Cabañas Agrela, ed, Egales)



La gota acabó con Jaime I ya senil en medio de grandes dolores, los últimos años de su vida los pasó rodeado de la familia de su amante y favorito real, a quienes adoptó como su propia familia.
Mas información:
 http://rictornorton.co.uk
http://www.editorialegales.com/libros/reyes-sodomitas/9788492813629/

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